Hay dos tipos principales de radiación UV a las que nos exponemos. Los rayos UVA y los rayos UVB. La sobreexposición a los rayos UVB pueden causar quemaduras de sol, cáncer de piel, cataratas (opacidad del cristalino del ojo) y puede dañar su sistema inmunológico. El bronceado es la reacción natural de su cuerpo que se produce cuando la piel está expuesta al sol y la radiación UV. Cuando se broncea, su cuerpo produce más melanina, una sustancia química dentro de la piel. Esto forma una capa – el bronceado – para proteger la piel. El bronceado bloquea parte de la radiación, pero no es una protección adecuada contra el cáncer de piel.

La quemadura solar es el enrojecimiento de la piel, causada por la sobreexposición al sol. Se trata de una reacción tardía en la que la mayoría del dolor se produce 12-24 horas después de la exposición. Las quemaduras solares graves pueden aumentan el riesgo de desarrollar cáncer de piel en adultos.

Los factores de riesgo que podemos encontrar son:

Tipo de piel: Piel clara que se quema fácilmente y las personas con piel pecosa

Lunares: Personas con muchos lunares

Gente que visita o vive en climas soleados.

Tipos de daños:

El daño a corto plazo incluye: Piel quemada por el sol, irritación de la piel, irritación de los ojos o conjuntivitis si no se utilizan gafas apropiadas.

Daños a largo plazo: El envejecimiento prematuro de la piel que luego se verá cerosa y arrugada. Cáncer de la piel, cuanto se exponga, mayores serán los riesgos.